Si estás dispuesta a cambiar tus uñas naturales por unas esculpidas, tenés que tener en cuenta cómo cuidarlas. Siempre usá guantes al momento de lavar los platos, sobre todo si el agua está demasiado caliente o si utilizás productos que pueden ser agresivos para las manos, como detergentes, lavandinas y antigrasas. Nunca abras recipientes con las uñas y observá su aspecto constantemente, porque si surge algún inconveniente vas a tener que recurrir a un esteticista para que lo solucione.

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Se debe hacer un mantenimiento cada 21 días, de acuerdo al crecimiento de la uña natural y del cuidado diario de la misma. El servicio de mantenimiento consiste en rellenar la hendidura que se crea entre la uña esculpida y la cutícula, además de un limado y un retoque general para que parezcan recién colocadas.  Al tratarlas con delicadeza y asistir al mantenimiento en la fecha indicada, estas uñas se mantienen bellas y duran mucho tiempo. El precio de uñas esculpidas perfectas es mínimo si tenés en cuenta la durabilidad de las mismas.